"Cirugía Plástica Avanzada · Técnicas mínimamente invasivas · Resultados naturales"
Tras una sólida formación nacional e internacional, el Dr. Rubén Hidalgo se ha superespecializado en Rinoplastia, una de las cirugías más demandadas y, a la vez, más complejas de nuestra especialidad.
La nariz es una estructura delicada donde milímetros marcan la diferencia. Por eso, esta cirugía requiere una planificación precisa y un conocimiento profundo de la anatomía y la armonía facial.
En los últimos años, el avance de técnicas como la Rinoplastia Ultrasónica y la Rinoplastia Preservadora ha permitido obtener resultados más naturales, con menos inflamación y una recuperación más rápida.
Por todo ello, es esencial ponerse en manos de un cirujano plástico especializado exclusivamente en Rinoplastia, donde la técnica, la experiencia y la sensibilidad estética van de la mano.
Rinoplastia Ultrasónica
Técnica avanzada sin fractura tradicional, que permite realizar cortes más controlados y precisos.
Al no dañar los tejidos blandos, la recuperación resulta más rápida, menos dolorosa y con mínima o ninguna aparición de hematomas.
Rinoplastia de Preservación
Técnica innovadora que aprendí durante mi formación en centros de referencia en Turquía, reconocidos por su liderazgo en este campo.
Permite obtener resultados más naturales, manteniendo las estructuras nasales y favoreciendo una recuperación más rápida y cómoda.
Rinoplastia funcional
Corrección de desviaciones septales o problemas respiratorios derivados de obstrucciones bajas.
Rinoplastia secundaria (revisión)
Corrección de cirugías previas con resultados insatisfactorios o complicaciones.
La ultrasónica es más precisa, menos traumática y con recuperación más rápida. Sustituye al martillo y escoplo.
Se busca armonía, no transformación radical. El resultado será natural.
El objetivo es que tu nariz no desentone, no llame la atención; es decir, que consigamos un resultado que se integre en armonía facial con el restos de tus rasgos.
La rinoplastia busca armonía, no cambios radicales. El objetivo es armonizar tu cara, no cambiarla por completo.
Con la técnica adecuada y apoyados en la tecnología ultrasónica, la rinoplastia no es una cirugía dolorosa. Los hematomas son mínimos o nulos y el proceso de recuperación es, por lo general, muy llevadero.
De ahí la importancia de elegir un centro especializado en esta técnica.
No, los tapones son cosas del pasado. Utilizamos láminas de silicona (Doyls) que no verás y son más cómodas.
La primera semana llevarás la férula para protegerte y estas láminas dentro de la nariz.
Sí, podemos realizar una simulación con programas informáticos para entender mejor qué tipo de resultado estás buscando; no sirven para predecir el resultado.
La mayoría de pacientes retoma su rutina entre 7 y 10 días después.
A la semana quitaremos la férula y ya se verá el resultado aproximado. Sin embargo, la definición fina vendrá con el paso de semanas e incluso meses.
En pieles gruesas, por ejemplo, donde la inflamación es mayor, la punta puede tardar hasta 6 meses en conseguir la definición que dejamos en quirófano.
Durante las primeras semanas, para evitar las marcas de apoyo, deberás usar poco o nada gafas. Te recomiendo el uso de lentillas.
Sí, si existe una alteración funcional, se puede corregir en la misma cirugía.
No. La incisión se hace de forma interna o en zonas poco visibles.
Podrás comenzar a hacer actividad moderada (bicicleta estática) a partir de las 2 semanas. El deporte de intensidad tendremos que espaciarlo 1 mes. El objetivo es conseguir estabilizar el resultado, tu nariz es para toda la vida.
La rinoplastia no es una técnica general en Cirugía Plástica.
Requiere una superespecialización debido a la demanda técnica que precisa. Por ello, te recomiendo que te operes con un cirujano Plástico que enfoque su actividad en Rinoplastia.
Solicita una valoración médica. Estudiaré tu caso y te presentaré el mejor plan quirúrgico, adaptado a tus rasgos y necesidades.